Como se ha contado un chiste de catalanes, permitanme la licencia de contar uno de hace muchos años.
Era la noche de 23 F, Tejero en el Congreso, Las ratas huyendo por los Pirineos, Algunas asociaciones y sindicatos quemando papeles de sus archivo. No se sabia lo que pasaría.
Llamada del Rey, cuando ya se vislumbraba algo del final, al Jordi Pujol.
“Tranquilo Jordi tranquilo. no tengas miedo, No te intranquilices.
Respuesta de Pujol.
Que Jordi ni que narices, mi nombre es Jorge, Me llamo JORGE.